LA GLOCALIZACIÓN CONTRAATACA
Últimamente asistimos a una tendencia, o más bien a una ola, de populismo que se esconde tras la bandera del proteccionismo, el nacionalismo y el separatismo. Estos movimientos asumen y prometen soluciones fáciles contra los peligros de la globalización en forma de inmigración, competencia sin fin y distribución injusta de la riqueza.
Sorprendentemente, estos movimientos suelen provenir de una clase media que actúa desde su posición segura, ya que las clases realmente desfavorecidas no tienen ni tiempo ni dinero para protestar. Sin embargo, serán los que más sufran las consecuencias de estas olas. Además, sus líderes pretenden representar a una abrumadora mayoría aunque sean una minoría. La cobertura mediática les ayuda a hacerlo. Donald Trump envía sus saludos.
Sin embargo, dado que el dinero y los activos siempre se han movido más rápido - y seguirán haciéndolo en el futuro - las consecuencias, aunque evidentes, se sentirán principalmente a medio y largo plazo. Esto se debe a que los inversores buscan estabilidad jurídica y política y odian la incertidumbre. Al ser tan tímidos como los animales raros, tardarán décadas en volver, en lugar de años.
Mientras tanto, la glocalización contraataca en forma de competidores que llenarán gustosamente el vacío creado con sus productos y servicios. Y lo harán con éxito, porque todos estos movimientos no tienen otro plan que quejarse y lamentar su condición de víctimas. La cuestión interesante será cuánto tiempo tardarán sus propios "partidarios" en darse cuenta de que han sido engañados masivamente.
Así que recomiendo mantener la frustrante calma, buscar nuevas oportunidades y desarrollar un plan glocal.
Marc Ambrock
www.marcambrock.com